Manchas de tinte en la ropa.A veces, al teñirse el cabello una misma se salpica la ropa. Si te pasa, rocía la mancha con laca del pelo y, una vez seca, echa desengrasante normal de cocina y mételo en la lavadora.
Rastros de humedad.
Cuando vayas a pintar las paredes y descubras en alguna zona manchas de humedad, tendrás que eliminarlas antes de empezar con la pintura. Mezcla en un recipiente sal y zumo de limón hasta que se forme una pasta y añade agua tibia, pero sin que quede muy líquida. Aplica con un pincel en la zona afectada y espera a que se seque.
Vaselina, un remedio eficaz.
Si alguna vez la llave de paso del agua o del gas se te resiste y te cuesta trabajo abrirla o cerrarla, aplica un poco de vaselina a modo de lubricante y ¡solucionado! También va bien para las bisagras que chirrían.
Abrillantador ecológico.
Mezcla en un bol tres partes de aceite de oliva y una de vinagre blanco. Aplica sobre la superficie de tus muebles de madera con un paño frotando suavemente. Deja secar al aire libre y no coloques nada encima hasta que no esté seco o quedará marca.
¡Guerra a las avispas!
Las comidas al aire libre serán más tranquilas sin avispas alrededor. Pon un plato con unas rodajas de limón y varios clavos de olor incrustados y ni se acercarán.
Conserva tus encajes como el primer día.
Paños, pañuelos, prendas con blondas... Ahora que ya no se lleva tanto, tal vez los tengas guardados y notes que han amarilleado. Si quieres conseguir que queden como nuevos y recuperen su aspecto original, solo tienes que introducirlos durante una noche en una mezcla con agua fría y cerveza a partes iguales.
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